La Federación de Baloncesto de Ucrania atraviesa momentos de tensión tras la negativa de varios jugadores ucranianos que militan en la NBA a unirse a la selección nacional para los partidos clasificatorios previos al Mundial 2027.
Mikhail Brodsky, presidente de la Federación, no contuvo su indignación y calificó esta decisión como una 'vergüenza'. Sus críticas apuntan directamente a Sviatoslav Mikhailyuk, Alex Len y Dmytro Skapintsev, quienes han ignorado la convocatoria para los encuentros clasificatorios. También Volodymyr Herun rechazó la llamada, alegando una combinación de problemas familiares, salud y compromisos contractuales.
'Estoy pensando, ¿y si nuestros ucranianos en el extranjero comenzaran a asistir a los partidos de los que se negaron y les escribieran en carteles que son traidores de Ucrania?', expresó Brodsky en Facebook, sugiriendo incluso acciones de protesta contra estos jugadores.
El entrenador principal, Ainars Bagatskis, tampoco moderó sus palabras tras el partido contra Eslovaquia. En una transmisión en vivo, calificó a los ausentes como 'auténticos desechos', contrastando su actitud con la dedicación mostrada por quienes sí representan al país.
Las reacciones en la comunidad baloncestística han sido igualmente severas. Andriy Agafonov, capitán del 'Cherkasy Mavpy', declaró que estos jugadores 'no son ucranianos', refiriéndose a su distanciamiento mental de su patria.
Estas controversias surgen en un momento crucial para la selección ucraniana, que actualmente lidera su grupo en la pre-clasificación para el Mundial 2027 tras una derrota ante Suiza (64:66) y una victoria frente a Eslovaquia (80:71). La segunda ronda decisiva comenzará el 12 de agosto con el enfrentamiento entre Suiza y Eslovaquia.