El centrocampista argentino Rodrigo De Paul está a punto de hacer historia en la Major League Soccer (MLS) con su traslado al Inter Miami CF procedente del Atlético Madrid. Según informes recientes, ambos clubes han llegado a un acuerdo que convertirá al jugador de 31 años en el fichaje más caro en la historia del club floridano.
El acuerdo, valorado en aproximadamente 15 millones de euros, se estructurará de manera peculiar: el Atlético Madrid extenderá el contrato de De Paul hasta 2027 para posteriormente cederlo al Inter Miami con una obligación de compra. Se espera que la operación se complete antes de la apertura del mercado secundario de la MLS el 24 de julio, y el internacional argentino firmará un contrato por cuatro temporadas.
La llegada de De Paul al club presidido por David Beckham y Jorge Mas representa un movimiento sorprendente considerando que el mediocampista era titular indiscutible bajo las órdenes de Diego Simeone en la temporada 2024/25, donde acumuló tres goles y diez asistencias en 53 partidos. Sin embargo, la intensa actividad del Atlético en el mercado de fichajes, con las incorporaciones de Álex Baena, Johnny Cardoso y el inminente fichaje de Thiago Almada, ha facilitado su salida.
Un factor determinante en esta transferencia ha sido la presencia de Lionel Messi, compañero de De Paul en la selección argentina. El astro argentino habría manifestado su deseo de contar con un mediocampista defensivo de mayor presencia física, perfil que De Paul cumple a la perfección.
El reto para Inter Miami radica ahora en el equilibrio salarial, ya que el club cuenta actualmente con tres Jugadores Designados (DP): Messi, Jordi Alba y Sergio Busquets. La estructura de préstamo inicial permitirá que De Paul no ocupe plaza de DP hasta la temporada 2026, dando tiempo al club para reorganizar su plantilla.
Este fichaje podría anticipar la retirada de Busquets, quien cumplirá 37 años en julio y ha mostrado dificultades para mantener el ritmo en las competiciones. De confirmarse su marcha, el campeón del mundo argentino se perfila como el sustituto ideal en el mediocampo del equipo de Florida.
Con este movimiento, los propietarios del Inter Miami demuestran su ambición de competir al más alto nivel, tanto en la MLS como en torneos continentales como la Concacaf Champions Cup, consolidando así la marca global del club.
